Un tierno blues

Un cuerpo de lágrimas

este cuerpo tiene un nombre
la mesa está servida
en los bordes de los manteles 
la respuesta 
cada objeto tiene su lugar
el respaldo del asiento se clava en mi espalda
la carne y las papas obscenas
mi boca
llena de tierra 
la gente escupe porque le sobra
llenos
con comida entre los dientes 
y me revuelve el estómago.
los pájaros borrachos de la madrugada
suplican la huída
hago de tonta
todos fingen
una voz ronca dice groserías de mis piernas
la perra en celo grita en el frío de la noche
del otro lado de la mesa
un guiño
cae la baba.
meto carne a la fuerza en mi boca
alguien finge un amor por teléfono
me muerdo la lengua
no suelo recordar las direcciones
por esta vez 
lo dejo ir
la perra sufre 
no habrá fuego esta noche
trago mi pedazo de carne en silencio
mientras el carbón de mi garganta
se apaga
en un tierno blues